Bosques Hyrcanios

En esta ocasión les traigo un lugar muy hermoso y rico en biodiversidad que casi siempre es desconocido o ignorado aquí en Occidente, donde se tiene más bien una imagen de enormes extensiones desérticas y matorrales esteparios con respecto a la patria que alberga a estos bosques relictos del periodo Terciario. Me refiero a los bosques hyrcanos del extremo norte de Irán, justamente en la orilla meridional de uno de los mares interiores de agua dulce más grandes de la Tierra: El Mar Caspio, el cual le da vida a estas lujuriosas selvas templadas de la hermosa Eurasia templada, y uno de sus mayores exponentes en diversidad biológica.

Ubicación geográfica de los bosques hyrcanos.
Montes Talysh, Azerbaiyán. Autor y crédito: Naturefriends – Own work – Wikipedia: https://commons.wikimedia.org/wiki/Category:Talysh_Mountains#/media/File:(L)_Tal%C4%B1%C5%9F_da%C4%9Flar%C4%B1_097.jpg.
Camino de Khalkhal a Asalem; provincia de Gilan, Irán. (Autor y crédito: IMNANEWS).
Villa de Balachelli; provincia de Golestan, Irán. (Autor y crédito: IMNANEWS).

Con una extensión territorial de 55,000 km cuadrados, los bosques hyrcanos comprenden una estrecha franja encerrada entre las orillas sureñas del Mar Caspio así como las laderas septentrionales de las montañas Elbruz, en el extremo norte de Irán, así como una pequeña porción sur-oriental de las montañas Talysh, en Azerbaiyán. El nombre de «Hyrcania» quiere decir, en Persa, «tierra de lobos», y ello se debía a lo numeroso que eran estos animales junto a otros muchos ya extirpados o en peligro de extinción en la región como el lince euroasiático, jabalí, chacal dorado, leopardo del Cáucaso, oso pardo o el majestuoso tigre del Caspio. Los bosques aquí están fitogeográficamente relacionados con aquellos de los Balcanes, principalmente por su clima subtropical y continental debido a la altura, por su relieve montañoso y por la abundancia común del haya oriental (Fagus orientalis), dominante en muchos rodales montañosos, y que constituye alrededor del 32.7% del volumen total maderero de los bosques hyrcanos. No obstante, contiene numerosos géneros y especies completamente extintos en Europa, y cuyos fósiles en dicho continente señalan un clima europeo pre-glacial más cálido y húmedo que el actual, con variaciones termales estacionales así mismo más acusadas.

Río Zayandeh; Bakhtiari, Irán. (Autor y crédito: IMNANEWS).
Bosque hyrcanio en otoño. Autor y crédito: Mehr News Agency – Wikipedia: https://en.wikipedia.org/wiki/Hyrcanian_forests#/media/File:3615551_%D8%AA%D8%B5%D8%A7%D9%88%DB%8C%D8%B1_%D9%87%D9%88%D8%A7%DB%8C%DB%8C_%D8%AC%D8%A7%D8%AF%D9%87_%D9%87%D8%A7%DB%8C_%D9%BE%D8%A7%DB%8C%DB%8C%D8%B2%DB%8C_%D8%AC%D9%86%DA%AF%D9%84_%D9%87%D8%A7%DB%8C_%D9%87%DB%8C%D8%B1%DA%A9%D8%A7%D9%86%DB%8C.jpg
Gorgan, provincia de Golestan, Irán. (Autor y crédito: Ehsan Abbasi).
Provincia de Gorgan, Irán. Autor y crédito: IMNANEWS

Entre dichos géneros relictos destacan Parrotia; Zelkova; Pterocarya; Platycladus; Buxus, Punica; Melia; Epimedium; Ficus, Diospyros; Gleditsia y Celtis. Dichos géneros estuvieron presentes en los bosques templados caducifolios de Europa desde el Eoceno hasta antes de las grandes glaciaciones pleistocénicas, en donde fueron extintas, sobreviviendo sólo en refugios libres de los hielos polares como éste. A éstos géneros se les unen varias especies comunes en las florestas deciduas del sureste europeo que, en conjunto, conforman una flora sumamente diversa alimentada por influencias florísticas tanto Euro – Siberianas como Irano – Turanias. Estas florestas, abrumadoramente dominadas por especies templadas caducifolias, cubren las provincias iraníes de Khorasan septentrional; Golestan meridional; Mazandaran; Gilan y Ardabil (en sentido de Este hacia el Oeste). En Azerbaiyán incluye las tierras bajas de Lankaran y los montes Talysh. Ésta ecorregión goza de una gran variedad de climas dependiendo la elevación: En las planicies costeras el clima es subtropical húmedo (Cfa) con veranos muy calurosos e inviernos suaves sin acumulación de nieve. En las elevaciones medias torna a templado oceánico (Cfb), mientras que en las montañas se presenta como húmedo continental (Dfa) con inviernos rigurosos y abundantes nevadas debido a los vientos prevalecientes desde el Mar Caspio, llenos de humedad. Las precipitaciones van desde 900 mm en el oriente de la región hasta los 1,600 mm en el occidente, concentrándose principalmente en el otoño, invierno y la primavera. Así, ésta ecorregión difiere drásticamente en aspecto de los paisajes esteparios, áridos y semi – áridos dominantes en la Altiplanicie Iraní hacia el sur.

Provincia de Mazandaran, Irán.
Kelardasht, Provincia de Mazandaran, Irán. (Autor y crédito: Behnam Safarzadeh).
Qazvin y Gilan; Irán. (Autor y crédito: Pouya Abbasi).
Qazvin y Gilan; Irán. (Autor y crédito: Pouya Abbasi).

Bosque Caducifolio de Tierras Bajas

Originalmente dominaban toda la llanura aluvial del sur del Mar Caspio, entre los 0 y los 700 metros de altitud, en suelos húmedos pero bien drenados, generalmente arenosos o de arcillas con margas. Los árboles dominantes son todos termófilos (que gustan de las condiciones cálidas en verano), y aquí se suelen ubicar en posiciones de pendientes inferiores norte, noroeste, sureste y este, e incluyen a numerosos relictos del Terciario europeo, algunos de los cuales sólo se pueden encontrar en esta ecorregión. Las faldas de los montes Elbruz, así como sus laderas hasta los 700 msnm están dominadas por la parrotia de Persia o árbol del hierro (Parrotia persica), zelkova del Cáucaso (Zelkova carpinifolia), acacia de Constantinopla (Albizzia julibrissin), robinia del Caspio (Gleditsia caspica), arce del Cáucaso (Acer velutinum) y nogal del Cáucaso (Pterocarya fraxinifolia), junto al roble persa (Quercus castaneifolia) y el carpe europeo (Carpinus betulus), que penetran en comunidades submontanas y montanas de las laderas norte de los montes Elbruz. El roble carballo (Quercus robur) aparece en esta comunidad dentro de la mitad occidental y noroccidental de la ecorregión.

Parrotia de Persia o árbol del hierro (Parrotia persica).
Zelkova del Cáucaso (Zelkova carpinifolia).
Nogal del Cáucaso (Pterocarya fraxinifolia).
Roble persa (Quercus castaneifolia).
Arce del Cáucaso (Acer velutinum).
Morera (Morus nigra).

El endémico y relicto del Terciario Parrotia persica, la parrotia de Persia; ésta se mezcla junto al olmo del Cáucaso (Zelkova carpinifolia); roble iraní (Quercus castaneifolia); el endémico arce hyrcano (Acer velutinum) carpe europeo y del Cáucaso (Carpinus betulus; C. caucasica); mimosa de Constantinopla y kaki. A ellos se les unen como acompañantes especies características de los bosques riparios como el aliso (Alnus glutinosa), chopo blanco (Populus alba), olmo común (Ulmus minor), almez (Celtis australis), nogal de Castilla (Juglans regia), kaki común (Diospyros lotus), sicómoro oriental (Platanus orientalis), y árboles frutales como el membrillo (Cydonia oblonga), la higuera (Ficus carica), morera (Morus nigra), árbol del paraíso (Melia azedarach), granada (Punica granatum) y chabacano (Prunus armeniaca), los cuales de hecho son ahora más comunes, pero no de forma natural, sino como resultado de la amplia ocupación de esta formación forestal y su transformación en sembradíos de arroz y de frutales templados.

Carpe europeo (Carpinus betulus).
Roble carballo (Quercus robur). Autor y crédito: Robert Flogaus-Faust.
Robinia del Caspio (Gleditsia caspica).
Sicómoro oriental (Platanus orientalis). Autor y crédito: Don’t just «click» pictures – Flickr.
Acacia de Constantinopla (Albizzia julibrissin).
Granada (Punica granatum).

La ocurrencia de numerosas especies arbustivas y trepadoras siempre verdes determina la fisionomía de la mayoría de estos bosques, siendo en su gran mayoría, como en el caso de los árboles, también relictos de la flora templada caducifolia europea del Terciario. Algunas especies de este tipo son: Hedera pastuchovii, Ruscus hyrcanus, Boj (Buxus hyrcana), Danae racemosa y Ciruelo del Caspio (Laurocerasus officinalis). La cantidad de arbustos y trepadoras es igualmente impresionante, e incluye a varios endemismos previamente distribuidos de forma amplia por Europa, el Medio Oriente e incluso por Siberia. Encontramos Andrache colchica; Boj (Buxus sempervirens); Hypericum androsaemum; Epimedium pinnatum; Ruscus hyrcanus; Clematis vitalba; Hedera colchica; Rubus caesius; Smilax excelsa y Vitis sylvestris.

Nogal de Castilla (Juglans regia). Autor y crédito: Sokolov Yuriy Ivanovich – Naturalista.
Chabacano (Prunus armeniaca). Autor y crédito: grandbambi – Naturalista.
Chopo blanco (Populus alba).
Kaki (Diospyros lotus). Propiedad de: Alamy.
Almez (Celtis australis).
Peral (Pyrus communis).

Bosque Caducifolio Submontano

Están ubicados entre los 700 y los 1,400 metros de altitud, en laderas bajas y medias de pendientes, sobre suelos que van de subséricos a mesofílicos, en laderas de casi todas las orientaciones posibles, usualmente hacia el norte, noroeste y oriente, sobre suelos de margas y margas arenosas, con un drenaje que fluctúa desde muy bueno hasta moderadamente bueno. Hacia abajo hacen contacto con los bosques caducifolios de tierras bajas, y hacia arriba con los bosques caducifolios montanos. Debido a estas diferencias edáficas, topográficas y de microclima, existen numerosos ensamblajes, dominantes y codominantes en esta comunidad forestal. Este un bosque mixto con una gran diversidad en el dosel arbóreo, muy superior a la encontrada en cualquier bosque templado caducifolio europeo (aunque no tan grande como la que encontramos en Asia Oriental templada o el este de Norteamérica), que nos permite una ventana hacia el pasado aproximada sobre la impresionante biodiversidad que solía tener Europa occidental y central antes de las glaciaciones el Pleistoceno.

Haya oriental (Fagus orientalis).
Roble iraní (Quercus castaneifolia).
Carpe europeo (Carpinus betulus). Autor y crédito: University of Utah.
Castaño europeo (Castanea sativa).
Parrotia de Persia (Parrotia persica). Autor y crédito: Andreas Rockstein.
Avellano (Corylus avellana).

Así, el haya oriental (Fagus orientalis) domina en la mitad occidental de la ecorregión, e incluso no es poco común que forme rodales casi puros, mientras que el roble persa (Quercus castaneifolia) y el carpe europeo (Carpinus betulus) lo hacen en la mitad oriental, aunque a lo largo de toda la ecorregión los tres se asocian como codominantes en numerosos rodales, siendo la primera especie prevalente en los suelos más mesofílicos y fértiles y las otras dos en suelos seco-mésicos y de fertilidad intermedia. Otras dos especies muy comunes junto a las anteriores son el roble albar (Quercus petraea), que se vuelve más común en los suelos seco-mésicos y subséricos, con fertilidad relativamente baja o media, y el castaño europeo (Castanea sativa), que prefiere los suelos ácidos o las calizas bien lavadas, y que crece en un gran espectro de suelos y aspectos, incluyendo los más mesofílicos y las orientaciones más cálidas, aunque es más abundante sobre lo suelos seco-mésicos de pendientes superiores. El roble del Cáucaso (Quercus macranthera), y el carpe oriental (Carpinus orientalis), prefieren las condiciones más secas y los suelos más pobres.

Roble albar (Quercus petraea). Autor y crédito: Daniela Secas – Naturalista.
Tilo del Cáucaso (Tilia tomentosa).
Arce hyrcano (Acer hyrcanum). Autor y crédito: Svetlana Bogdanovich.
Fresno europeo (Fraxinus excelsior). Autor y crédito: chrisser.
Olmo del Cáucaso (Zelkova carpinifolia).

Estos bosques poseen condiciones climatológicas más frías en promedio que aquellas predominantes en los bosques caducifolios de tierras bajas, por lo que las especies termófilas allí dominantes disminuyen su densidad y abundancia en esta comunidad forestal, volviéndose acompañantes secundarios o, cuando mucho, codominantes locales, por lo que este es un sistema de transición entre las comunidades vegetales de clima subtropical húmedo de las llanuras del Mar Caspio y aquellas de tipo montano pendiente arriba, en donde domina un clima de tipo continental húmedo con inviernos rigurosos y veranos más frescos. Por ende, y de manera inversa a lo que sucede con las especies de llanura, se incrementa la presencia de especies caducifolias templadas de afiliación Eurosiberiana tanto en el dosel arbóreo como en los estratos bajos.

Olmo de montaña (Ulmus glabra). Autor y crédito. cava.
Arce de Capadocia (Acer cappadocicum).
Tilo de hojas grandes (Tilia platyphyllos). Autor y crédito: YvoBentele-Creatrive Commons 4.0. Wikipedia.
Cerezo común (Prunus avium).
Arce real (Acer platanoides). Autor y crédito: Olegivvit – Own work – Wikipedia. Creative Commons 3.0.

Entre los 800 y los 1500 msnm encontramos el haya oriental o persa (Fagus orientalis), ésta haya puede crecer hasta 40 m. de altura y tener 3 m. de diámetro en su tronco; a diferencia del haya europea, sus hojas son más alargadas y está adaptada a climas con veranos muy calurosos, algo parecido al caso del haya americana (Fagus grandifolia); la segunda especie en importancia es el castaño europeo (Castanea sativa), de tronco recto, madera flexible y muy duradera, además con importancia clave en las cadenas alimenticia de los bosques de la región debido a sus nutritivas nueces con cáscara erizada de picos, muy nutritivas y de cosecha confiablemente abundante cada año. Entre los acompañantes arbóreos más comunes están el tilo del Cáucaso (Tilia tomentosa), el fresno europeo (Fraxinus excelsior), el cerezo común (Prunus avium), el olmo de montaña (Ulmus glabra), el arce hyrcano (Acer hyrcanum), el tejo europeo (Taxus baccata), el tilo de hojas grandes (Tilia platyphyllos), el arce persa (Acer velutinum), sorbo silvestre (Sorbus torminalis), y acirón o arce real (Acer platanoides). Entre las especies termófilas que podemos encontrar dispersas están la parrotia de Persia o árbol del hierro (Parrotia persica), la zelkova del Cáucaso (Zelkova carpinifolia), y el nogal caucásico (Pterocarya fraxinifolia).

Roble del Cáucaso (Quercus macranthera)
Carpe oriental (Carpinus orientalis). Autor y crédito: Dimìtar Nàydenov.
Arce persa (Acer velutinum).
Sorbo silvestre (Sorbus torminalis).
Nogal caucásico (Pterocarya fraxinifolia).

Bosque Caducifolio Montano

Se posiciona entre los 1,400 y los 1,800 metros de altitud, limitando hacia arriba con los bosques y florestas deciduas subalpinas, y hacia abajo con los bosques caducifolios submontanos, sobre laderas medias y crestas, de orientación norteña, noreste, sur, suroriental, suroccidental y occidental. Los suelos pueden ser desde fértiles y de humedad media hasta subséricos y poco fértiles. El clima es continental húmedo con lluvias todo el año (Dfa en la clasificación de Köeppen), por lo que los veranos tienen una temperatura máxima promedio superior a los 23° C. Esta comunidad vegetal está totalmente libre de especies deciduas termófilas de las tierras bajas aluviales, y en cambio está dominada en su totalidad por árboles caducifolios altamente tolerantes al frío.

Haya oriental (Fagus orientalis).
Roble albar (Quercus petraea). Autor y crédito: Alexis – Naturalista.
Carpe europeo (Carpinus betulus). Autor y crédito: Gabriel Axelsson – Naturalista.
Arce de Capadocia (Acer cappadocicum). Autor y crédito: Joss Carr – Naturalista.
Cerezo común (Prunus avium). Autor y crédito: ricebucket – Naturalista.
Avellano turco (Corylus colurna).

El dominante en los sitios más favorables es el haya oriental (Fagus orientalis), la cual con frecuencia forma grandes rodales puros, mientras que el roble del Cáucaso (Quercus macranthera) y el carpe oriental (Carpinus orientalis) asumen ese papel en los lugares más secos e infértiles; junto con los hayedos y las asociaciones séricas de roble-carpe pueden aparecer en forma de individuos dispersos o pequeños grupos el roble albar (Quercus petraea), que aquí alcanza uno de sus puntos de distribución natural más meridionales del Mundo. Estas especies se ven favorecidas por el clima con inviernos rigurosos, lluvias abundantes y frecuentes nieblas a lo largo de todo el año.

Roble del Cáucaso (Quercus macranthera).
Carpe oriental (Carpinus orientalis).
Olmo de montaña (Ulmus glabra).
Arce real (Acer platanoides).

Existe una cohorte de árboles deciduos que salpican al bosque como individuos aislados o en pequeños grupos, generalmente en cañadas, barrancos o concavidades protegidas, asumiendo, cuando mucho, una dominancia que es tanto local como esporádica; entre ellos están, siempre presentes en pequeñas cantidades y densidades, el tejo europeo (Taxus baccata), arce de Capadocia (Acer cappadocicum), cerezo común (Prunus avium), fresno europeo (Fraxinus excelsior), olmo de montaña (Ulmus glabra), tilo de hojas grandes (Tilia platyphyllos), carpe europeo (Carpinus betulus), arce persa (Acer velutinum), arce real (Acer platanoides), y serbal (Sorbus torminalis).

Fresno europeo (Fraxinus excelsior).
Arce persa (Acer velutinum). Autor y crédito: Houman Doroudi – Naturalista.
Sorbo silvestre (Sorbus torminalis).
Tejo europeo (Taxus baccata). Autor y crédito: Ángel S. Crespo.

Bosques Caducifolios Subalpinos

Ya en el estrato altitudinal forestal superior, entre los 1,600 y los 3,000 msnm, existe un bosque sub – alpino dominado por roble del Cáucaso (Quercus macranthera), la floresta es relativamente abierta comparada con los pisos altitudinales inferiores, y está acompañado de perales (Pyrus cordata; P. boissieriana); arce hyrcano (Acer hyrcanum); abedul plateado (Betula pendula); enebro (Juniperus communis) y serbal (Sorbus torminalis; S. aria). El suelo está cubierto por una vegetación bastante rica, entre la que se halla avellano (Corylus avellana) y taxones endémicos como Alchemilla farinosa (Asteraceae), Cortusa matthiola subsp. iranica (Primulaceae), Delphinium elbursense var. elbursense (Ranunculaceae), Scabiosa hyrcanica (Dipsaceae), Semervivum iranicum (Crassulaceae) y Stachys persica (Lamiaceae).

Roble del Cáucaso (Quercus macranthera).
Arce común (Acer campestre).
Roble albar (Quercus petraea). Autor y crédito: Nikolett Tóth – Naturalista.
Ciruelo-cerezo (Prunus cerasifera).
Tejo europeo (Taxus baccata).
Arce hyrcano (Acer hyrcanum).

También podemos hallar roble albar (Quercus petraea), arce de Montpellier (Acer monspessulanum), arce común (A. campestre), ciruelo-cerezo (Prunus cerasifera), ciprés mediterráneo (Cupressus sempervirens), arbovitae (Platycladus orientalis) y tejo europeo (Taxus baccata).

Abedúl plateado (Betula pendula).
Ciprés mediterráneo (Cupressus sempervirens).
Mostajo (Sorbus domestica).
Enebro (Juniperus communis).
Arce de Montpellier (Acer monspessulanum).
Peral (Pyrus communis).

El sustrato herbáceo – arbustivo es muy abundante, y se constituye de Frangula alnus; ciruelo (Prunus divaricata); acebo (Ilex hyrcana); Ruscus hyrcanus; Las lianas más comunes son Hedera pastuchowii, Periploca graeca y Smilax excelsa.

Andrachne colchica.
Andrachne colchica.
Boj (Buxus sempervirens).
Boj (Buxus sempervirens).
Hypericum androsaemum.
Hypericum androsaemum.
Epimedium pinnatum subsp colchicum
Epimedium pinnatum subsp colchicum.
Smilax excelsa
Smilax excelsa.

Ruscus hyrcanus.
Ruscus hyrcanus.
Clematis vitalba.
Clematis vitalba.
Hedera colchica.
Hedera colchica.
Rubus caesius.
Rubus caesius.
Parra euroasiática (Vitis vinifera).
Parra euroasiática (Vitis vinifera).

Ya que la luz que penetra al suelo es muy escasa, la vegetación es bastante rala la mayor parte del año, siendo sólo abundante gracias a las efímeras de primavera que cubren el estrato herbáceo durante la temporada en la que los árboles aún carecen de hojas. Las especies caracteríticas de estos bosques mésicos montanos son Cardamine bulbifera, Fragaria vesca, Filipendula ulmaria, Geranium robertianum, Geum urbanum, Lamium luteum, Lathraea squamaria, Phyllitis scolopendium, Potentilla reptans, Ranunculus constantinopolitanus, Sanicula europaea, Stellaria holostea y Viola odorata.

Hedera pastuchowii.
Hedera pastuchowii.
Peroploca graeca.
Peroploca graeca.
 Frangula alnus.
Frangula alnus.
Acebo (Ilex hyrcana).
Acebo (Ilex hyrcana).
Ciruelo (Prunus divaricata).
Ciruelo (Prunus divaricata).

Existen áreas aisladas cubiertas de bosques de coníferas, relictuales de condiciones mediterráneas más secas que las actuales durante el Mioceno, y que ahora sólo cubren unas pocas hectáreas aisladas en los montes Elbruz, siendo bastante más comunes en sus laderas meridionales. La conífera característica es el ciprés mediterráneo (Cupressus sempervirens), acompañada de enebro (Juniperus communis) y arbovitae (Platycladus orientalis), endémico a esta ecorregión. En la ladera norte de la cordillera del Elbruz, éstas especies sólo aparecen bajo sustratos arenosos, secos y pobres en materia orgánica, los cuales les permiten crecer libres de la competencia de las caducifolias, mientras que en sus laderas sur el clima más seco les permite una dominancia junto a encinas y árboles frutales de baja estatura.

Fresa silvestre (Fragaria vesca).
Fresa silvestre (Fragaria vesca).
 Cardamine bulbifera.
Cardamine bulbifera.
Geranio (Geranium robertianum).
Geranio (Geranium robertianum).
Violeta (Viola odorata).
Violeta (Viola odorata).
Sanicula europaea.
Sanicula europaea.

Con tantos contrastes de elevación con respecto al nivel del mar, es muy normal que las florestas varíen en cuanto a composición de especies forestales a medida que vamos ganando altitud; así, en la planicie costera del Caspio, sobre suelos muy húmedos y a veces anegados debido a un pobre drenaje, encontramos marjales de agua dulce y bosques dominados por una combinación de aliso (Alnus subcordata) y nogal del Cáucaso (Pterocarya fraxinifolia). Asociados comunes incluyen a la mimosa (Albizia julibrissin); kaki (Diospyros lotus); ciruela del Caspio (Prunus caspica); almez euroasiático (Celtis australis); higuera (Ficus carica); fresno europeo (Fraxinus excelsior); morera (Morus nigra);  chopo del Caspio (Populus caspica); melia (Melia azedarach) y Gleditsia caspica.

Sicómoro oriental (Platanus orientalis).
Chopo del Caspio (Populus caspica).
Nogal del Cáucaso (Pterocarya fraxinifolia).
Arce griego (Acer heldreichii)
Aliso (Alnus subcordata).
Melia (Melia azedarach).
Acacia del Caspio (Gleditsia caspica).
Almez (Celtis australis).
Ciruelo del Caspio (Prunus laurocerasus).
Higuera (Ficus carica).

Estos bosques sufren de una creciente presión humana que ocupa los espacios antes boscosos para el urbanismo, la agricultura y la ganadería. En particular, los bosques de la planicie costera del Mar Caspio han sido casi totalmente talados y sustituidos con plantaciones de arroz y frutales gracias al rico suelo de limo y de abundante humedad. Como la mayor reserva de madera en pie de Irán, sus especies de maderas duras son explotadas intensivamente, pero con una administración forestal inadecuada, lo cual es más preocupante ante la posición de los bosques hyrcanos como refugio de especies endémicas y en peligro de extinción.

6 Comentarios Agrega el tuyo

  1. gatinha87 dice:

    Buenas noches compañero, ¡qué temazo! Felicidades. Una persona que no está familiarizada con investigar los paisajes de cada rincón del mundo, imaginaría que Irán es completamente desértico o mediterráneo, sin embaargo éstas imágenes que nos muestran nos dejan entrever la hermosura de la flora de aquel país, Es un pequeño rincón en el que cualquiera querría perderse. Parece un bosque mediterráneo mezclado con un bosque del norte, donde los árboles son bajos pero muy coloridos. ¡Enhorabuena compañero!

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    1. oreomunnea dice:

      Hola Gatinha, es cierto, a menos que uno sea profesional o apasionado de estos temas, prácticamente nadie sabe de esta joya natural de Irán. Déjame decirte que aunque los árboles son cada vez más bajos debido a la tala inmoderada y la expansión de la frontera agrícola y urbana, los bosques hyrcanios aún son bastión de algunos de los árboles más altos y grandes de cualquier bosque templado caducifolio en el Mundo. Las hayas orientales son comúnmente de 40 m. de alto en rodales vírgenes, lo mismo los robles persas o iraníes. Incluso árboles relativamente bajos como la parrotia de Persia o el carpe europeo alcanzan 20 m. de alto Aquí es de lso pocos lugares del Mundo donde el castaño europeo es un dominante del ecosistema, y como su hábito de crecimiento es imponente, de hasta 35 o 40 m. de alto, se puede vislumbrar el papel ecológico que tenía su pariente norteamericano en los Apalaches antes de la grafosis del castaño que lo tiene casi extinto. Saludos y gracias por comentar el tema.

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  2. Daniel dice:

    Me ha encantado. He dado con tu blog de chiripa hoy mirando y buscando los orígenes de mi árbol preferido el Morus nigra y demás flora de la region. Y descubrí a través de fotos de google maps y lo intenso del verde de la imágenes satelitales de esta región del norte de irán nunca imagine un bosque con tanta biodiversidad como se intuía en las fotos que vi por maps, He quedado fascinado. Y me lo apunto en la libreta de mochileo jeje pero nose no me atrevo a ir con la situación actual con el ISIS. No se si tal vez algún día al norte de la region boscosa por Azerbaiyán. Saludos felicitaciones por tan buena información y mis mejores deseos. Aaa por cierto!!! el articulo va ha favoritos 😉

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    1. oreomunnea dice:

      ¡Hola Daniel! Antes que nada, nos honra muchísimo no sólo que te haya encantado nuestro artículo, sino que lo hayas puesto dentro de tus favoritos, así como por tus buenos deseos hacia nosotros. Fíjate que lo que comentas sobre ISIS es una cuestión de riesgo totalmente real que hace muy difícil o de plano imposible el conocimiento de las bellezas naturales de los países musulmanes, y es más dificil digerir la situación cuando se sabe que casi todos ellos en algún momento pertenecieron a nuestra esfera cultural occidental y cristiana. Si te gustamos, por favor no te olvides de darle like al artículo y difundirlo con tus conocidos que gusten de estos temas; sólo mediante el apoyo de ustedes en forma de likes y comentarios como el de aquí podemos seguir creciendo; también nos ayuda si puedes poner de dónde nos visitas y qué temas te gustaría ver en el futuro en este espacio; un saludo cordial, ojalá logres visitar ese mágico lugar que es hogar de algo de la flora europea del Terciario dentro de Azerbaiyán.

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      1. Daniel dice:

        Muchas gracias si ojala pues os escribo desde Málaga, Andalucía. Pues si ojala tengo muchos sitios en la libretilla por visitar jeje y si es una pena porque este tal ISIS (OTAN, grupos paramilitares de funciones adoctrinadoras con fines y trasfondo geopoliticos «petroleo,materias primas»,etc) esta acabando con gran parte del patrimonio de todos estos países musulmanes, su futuro y sus gentes a parte de sembrar o alimentar aun mas la semilla del odio. Y es una pena porque yo tengo amistades musulmanas muy bellas personas. Los intereses de unos pocos siempre han pasado por encima de civilizaciones enteras, pero bueno algún día se hará justicia. Estoy seguro de ello. Pues siempre me interesa el tema de la biodiversidad , saber que especies de flora o fauna forman parte de tal lugar en concreto cuando descubro un lugar nuevo. Y así como vosotros habéis tocado el tema de la flora, asi un poco en profundidad. Pues si ojala lo visite debe ser como un viaje al pasado del pangea pisar aquellas tierras casi virgenes jeje. Likedao y seguido 😉 . Saludos y mis mejores deseos.

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      2. oreomunnea dice:

        Hola de nuevo, Daniel, coincido plenamente contigo en el gusto que me provoca el conocimiento de la biodiversidad y el ecosistema de los distintos lugares del Planeta, y más aún si son lugares que se han visitado, como ha sido el caso en varios de los posts aquí elaborados, y en particular del Reino Biogeográfico Neártico (la zona templada de América del Norte, a la cual pertenece gran parte de mi país). Tu tierra es bellísima y enormemente diversa dentro del contexto europeo, desde sus bosques deciduos atlánticos en el Norte hasta sus florestas mediterráneas como en tu lugar de residencia; siempre es un gusto recibir a los lectores españoles, que constituyen el tercer grupo nacional que nos visita aquí, y que forjaron gran parte del carácter, la sangre y la cultura nacional mexicanas.

        Respecto a los que comentas de ISIS, es verdad que han sido los intereses económicos y estratégicos quienes han provocado en buena medida las guerras que actualmente azotan a buena parte del mundo islámico, y que han creado en su seno sentimientos ultranacionalistas y contrarios a ese Occidente que los ha invadido, masacrado y sumido en la pobreza, lo cual se exacerba a la vez por el hecho de que el Islam ha sido en muchas ocasiones en su historia una religión que ha impulsado a la conquista que transformó la conciencia y la religión de la mitad del antiguo mundo cristiano – occidental; primero por los árabes y más tarde por los turcos selyúcidas; tu propio país vivió 800 años de dicha ocupación, y si el Islam hubiese ganado quizá España no sería el gran país plenamente integrado a Europa Occidental que es hoy en día, además de ser la cabeza económica y cultural del mundo hispanoparlante. Desde luego, yo también he encontrado musulmanes que son finísimas personas, pero por desgracia lo que prima son los intereses de los poderosos de ambas partes: Gobiernos y dueños de empresas multinacionales petroleras y gaseras por un lado, y gobiernos teocráticos, ultra nacionalistas y ultra religiosos por otro, y en medio de todo, las multinacionales de producción y venta de armas, que cobran igual si son islámicos que occidentales, para ellos el dinero corre mientras más muertos hayan de ambos bandos.

        Mil gracias por tus likes y tu seguimiento a este espacio que es tuyo y del resto de los lectores; aunque soy apasionado de la ecología de Norteamérica, te adelanto que postearé más temas sobre la flora europea, sudamericana y de el resto del Mundo, siempre tratando de destacar maravillas poco conocidas para la mayoría, pero que están ahí para quien quiera descubrirlas; recibe un cordial saludo desde la Ciudad de México.

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