Familia: Agavaceae.

Género: Yucca.

Origen: Nueva Zelanda.

Longevidad: de 30 a 100 años.

Su nombre deriva del griego cordýle: maza, debido a a las raíces engrosadas con forma de porra.

Tiene un porte columnar con la copa redonda.

Se utiliza de forma ornamental en parques y jardines. Típica en rocalla o en macetas.

No es muy resistente al frío (5ºC). Ideal en clima mediterráneo o tropical.

Necesita suelos bien drenados y fértiles.

Puede llegar a medir 8 metros. Aunque en maceta no alcanza el metro y medio. Su anchura puede estar entre los 2-3 m.

Hojas: Agrupadas a modo de penacho en la terminación de las ramas, largas, acintadas, de 30-100 x 3-6 cm.

Flores: Grandes inflorescencias de flores muy pequeñas, blancas y olorosas en primavera, con más de 8 años. Fructifica en verano.

Fruto: Baya globosa blanca de 4 mm de diámetro.

Riego: Regar de forma abundante con poca cantidad de agua durante verano, sin encharcar el suelo para su correcto desarrollo. y en invierno evitar que el suelo se seque totalmente. Si se seca el suelo, amarillean las hojas, si está encharcado se pudren las raíces.

Poda: De formación a finales de invierno, favoreciendo el desarrollo de un tronco. O cortar el tallo principal, para formar múltiples troncos.

Multiplicación: Por semilla, esquejes de tallos viejos o por rebrotes de la planta en la base.

Existen híbridos como: ‘Atropurpurea’, con la base de las hojas de color púrpura; ‘Doucettii’ cuyas hojas muestran una raya blanca y márgenes rosas; ‘Green Godess’ ramificado; ‘Purpurea’ con follaje púrpura ; ‘Torbay sunset’, con hojas verde parto y tallos rojos; ‘Variegata’ con una lista blanca.